La plaza de san José con su fuente de los Delfines, la puerta gótica de la catedral y la casita del músico nos deja estampas tan bonita como esta.
La fuente instalada en 1877 en la plaza de Santo Domingo, frente al Mercado, además de evitar los tediosos paseos al rio para subir agua, ilumino más de una conversación de vecinos, ya que el Ayuntamiento aprovecho la llegada de la electricidad para acoplarle una farolita en su alto. La reforma de la Casa Consistorial desplazo a la ya fuente –farola al lugar que hoy ocupa.
Y si la fuente es curiosa la puerta de san José de la Catedral es la única medieval que se mantiene al exterior, gótica de 1425, la realizo Jehan Lome, el autor del sepulcro de Carlos III y Leonor. Arco apuntado, chapitel y arquivoltas cuajadas de figuras rodean la refinada representación de la coronación de la virgen.
A su lado la casita del Músico, el edificio civil más antiguo de Pamplona que aún se mantiene en pie. Personaje importante el maestro de capilla ya que a su cargo estaban organistas, campaneros y los músicos catedralicios, además de las misas polifónicas, y “entretenidos de arpas”.Cuando visitéis la Capilla de Música, en la Catedral, no dejéis de fijaros en la arquivolta de la Epifanía los ángeles músicos son geniales. Gaita, arpa, viola, hasta 10 instrumentos aparecen representados
La plazuela por tener, tiene hasta conventos, en la calle Salsipuedes las Carmelitas Descalzas de San José, fundado por la joven viuda Beatriz de Beaumont en 1583 y las Siervas de María que llegaron a Pamplona en 1878 para cuidar a los enfermos, labor que hoy siguen haciendo en los hospitales de la ciudad.
Y sin olvidar el Mercadillo de las Buenas Pulgas donde antigüedades y objetos de segunda mano salen a la calle el primer sábado del mes.
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